Por: Isaías Pérez Pérez

fotos: cortesía

Ella es un orgullo salvadoreño, ha logrado atravesar las fronteras del territorio gracias a su talento como escritora, es: Elena Salamanca, nacida en San Salvador en 1982, quien se ha dedicado a escribir cuentos, novelas y poesía.

Su pasión por la escritura inició desde los 9 años, justamente después del asesinato de su padre, fue entonces cuando comenzó a adentrarse en la literatura hasta convertirse en  una figura icónica de la cultura salvadoreña.

No obstante según Salamanca, su primer libro fue publicado cuando tenía 25 años, por la editorial del estado la Dirección de Publicaciones e Impresos fundada en 1953. Pero a los 21 años ganó diversos concursos, unos pequeños, como juegos florales o concursos de la UCA, donde estudió, y uno nacional: el premio de Novela Alfaguara, del que fue primera finalista en 2004.

Además de escribir cuentos, novelas y poesía Elena Salamanca es investigadora, pero también dice que su formación en México ha sido profesional como historiadora. Actualmente está terminando un doctorado en El Colegio de México, que es una de las instituciones de mayor excelencia en la rama.

“En 2009 recibí una beca para escribir una novela en México, era una beca para Iberoamérica promovida por la AECID de España y el FONCA de México, estaba destinada a creadores de diversas disciplinas. Además de escribir mi novela, en esa beca tuve mi primera experiencia con arte visual, y monté una instalación en el Centro Nacional de las Artes CENART, en una muestra iberoamericana. Esto es importante porque a partir de esa instalación yo he decidido aproximar a la literatura y a la investigación científica a otros lenguajes visuales, como el performance, la instalación y el bordado o el arte textil” comentó.

La escritora, mencionó que le gustó mucho el desarrollo cultural de México. Ya había vivido en España, estudiando un master en Historia iberoamericana, en 2008, y había participado en lecturas de poesía y conferencias en universidades españolas y en Casa de América de Madrid, en años posteriores, pero sintió más calidez, profesionalismo y excelencia en el sistema mexicano.

Asimismo entre 2011 y 2012, hizo una investigación sobre la relación de Juan Rulfo y Salarrué, viajó mucho a México, en ese tiempo estableció muchas relaciones con gente de la literatura y el arte visual, se sintió acogida. En 2012 aplicó a un programa de doctorado y fue aceptada, en 2013 su libro: “ Peces en la boca” fue publicado en México.

Aunque comparte que se dedica a la escritura híbrida, es decir que para ella el género literario es fluido y oscila entre un canon y otro, escribe narrativa, poesía, novela, ensayo literario y ensayo histórico. Tiene también la capacidad de escribir ciencia de divulgación y así ha contribuido a crear muchas fuentes sobre historia de El Salvador; aquí se destaca el libro: “Voces de El Salvador” que es una recopilación de reflexiones y propuestas de salvadoreños que permiten recordar la historia reciente del país.

“Yo me siento más cómoda entre la poesía, la narrativa y el ensayo literario, de modo que planteo mi escritura como fluida y transgénero (conceptos a los que he recurrido apoyada, claro, en las discusiones sobre género)” añade Elena Salamanca.

Finalmente respondiendo a la pregunta sobre ¿Qué temas han sido los más difíciles de abordar o escribir a lo largo de su carrera? La escritora manifestó lo siguiente: “como escritora: los duelos: el asesinato de mi papá, la muerte de mi abuelita, mi ser más amado en el mundo y la separación de mi pareja, con quien tuve una relación de 7 años, con mucha violencia sicológica y de género. Como historiadora: la unión de Centroamérica, pues trabajo en larga duración de 1823 a 1954. Como escritora de divulgación: los suicidios de niñas en El Salvador”.

Elena Salamanca sigue formándose en su ámbito y con la emergencia por el covid19 se la pasa leyendo en las redes los cuentos de Cipotes de Salarrué, con ese aire y singularidad que la caracteriza y que les invitamos a conocer.