En el fútbol hay que ser aficionado, nunca fanático
fotogalería: Elmer González
Hablar de Club deportivo Águila, es hacer mención del equipo de fútbol más popular de El Salvador, ostenta 15 títulos que lo convierten en el segundo más ganador a nivel nacional, y ni qué hablar de los jugadores históricos que sudaron con orgullo la camiseta emplumada, como el caza goles: Juan Francisco “Cariota” Barraza, delantero con una zurda letal que rompía las redes junto a las gargantas de miles de aguiluchos enardecidos, que celebraron los éxitos de los años 60’s.
El máximo goleador histórico es el salvadoreño, Luis Ramírez Zapata, quien consiguió 182 goles con la casaca aguilucha, desde los años 70 hasta inicios de los 90’s.
Los negro naranja, no solo han cosechado títulos a nivel nacional, si no también títulos internacionales, como la Copa de la Confederación Centroamericana de Fútbol (CONCACAF), en 1976.
Las décadas y los lustros han transcurrido como vuelo de águila, pero el equipo emplumado de la Ciudad de San Miguel, sigue siendo el más querido por la afición, el que causa pasión y admiración; muchos salvadoreños y en específico miguelenses estando en países distantes siguen muy de cerca el acontecer futbolístico de los aguiluchos, es evidente a través de las redes sociales su entusiasmo y las buenas vibras que envían al equipo partido tras partido. E inclusive en la capital, San Salvador está la BDC, Banda de la Capital, vaya donde vaya, juegue donde juegue asisten para alentar al cuadro naranja; a son de tambores, trompetas, güiros, ponen el ambiente de fiesta en las tribunas, en compañía de cánticos y parafraseo de ánimo como: “Yo te amo Aguilita de mi corazón”, y qué decir de la inmortal 12, que ponen el sabor desde el primer minuto hasta que el árbitro pita el final.
Uno de los integrantes de la banda, asegura: “Gane, empate o pierda yo te seguiré queriendo”, mientras los demás le acompañan con los sonidos de los instrumentos, la afición con los aplausos, silbidos y algarabía con las famosas bubucelas.
Actualmente, Club deportivo Águila, no atraviesa el mejor momento en cuanto a resultados, en el pasado torneo Apertura 2017, registró 22 partidos jugados, de ellos 6 ganados, 9 empates y 7 derrotas, en total anotó 33 goles a favor y 39 en contra, en total sumó 27 puntos; aún con la goleada que le propició el eterno rival de la capital (5-0), el águila emprendió vuelo rumbo a cuartos de final, donde enfrentó al equipo tigrillo que buscó como devorar e impedir el vuelo aguilucho, y lo consiguió; en el partido de ida jugado en el estadio Barraza donde empataron sin goles.
Enfocados en el partido de cuartos, del partido de vuelta, que se jugaría en el estadio Óscar Alberto Quiteño de la ciudad morena; dos días antes del partido el equipo aguilucho entrenó en el remodelado estadio Barraza; césped mojado, conos color naranja en el costado izquierdo del terreno de juego, algunos jugadores con gabachas color naranja y el resto con camisa negra y cuadros blancos, escudo del equipo y patrocinadores en la frontal, terminan el entreno con un partidillo donde la indicación del técnico argentino: Osvaldo “Pichi” Escudero, fue manejar el balón ‘a ras de piso’ y observar la movilidad de los jugadores emplumados.
Lastimosamente, Águila quedó eliminado de torneo…
Al finalizar por completo la práctica matutina, el entrenador brindó declaraciones a los medios asistentes; al retirarse algunos de los reporteros, le interrogué: ¿Qué se siente ser el técnico del equipo más popular del país? Con un gesto de rostro sorprendido, responde: – “Jamás me imaginé que me preguntarían eso hoy”; entrenar a Águila es una grandiosa oportunidad por el palmarés que ocupa en el fútbol nacional, la presión de la afición es grande pero a la vez motiva para trabajar con esfuerzo y querer hacer las cosas bien; en lo personal es una experiencia inolvidable en mi vida; he conocido muchas personas de San Miguel y sé del amor que se le tiene al equipo; es un compromiso y una responsabilidad estar al frente de un conjunto como Águila”.
En referencia a la pasión y al afecto que se le tiene al cuadro, don Eleazar Barrera, de 83 años, seguidor antaño del equipo, considera: “Un mal torneo no le quita a Águila el mérito y la grandeza; aun en Europa los equipos tienen buenas temporadas y otras como que la suerte no les llega; yo soy aguilucho desde los 7 años, mi abuelo me llevaba al estadio, en ese entonces Águila jugaba en el estadio Charléix; recuerdo los goles del Pelé Zapata, de Vladan Vicevic, que luego se nacionalizó; estos jugadores marcaron época y viven en la memoria de los aguiluchos. En la actualidad Águila sigue siendo Águila, con altibajos pero sigue siendo popular, con una gran afición; yo espero que siga ganando más títulos y que sea el más ganador”.
En el actual torneo Clausura 2018 águila, ha jugado 4 partidos, de ellos dos ganados, un empate y la derrota en el estadio Barraza, el domingo 28 de enero, ante el archirrival de la capital: Alianza, que se llevó la victoria 0-2; con estos resultados el equipo suma 7 puntos; la falta de gol sigue siendo un factor determinante, en cuatro partidos suma solamente 3 goles a favor y dos en contra.
Pero el sentimiento aguilucho no cabe duda que sigue intacto en el corazón de los aficionados miguelenses; en el fútbol hay que ser aficionados, nunca fanáticos, el fútbol es pasión y la empatía con un equipo se convierte en amor; son miles los aguiluchos que a pesar de los malos resultados no dejan de querer al cuadro emplumado, y aunque a veces parezca que es un águila desplumada, aseguran que resurgirá para emprender la senda del triunfo y conseguir las ansiadas coronas que hacen falta en las vitrinas.
Aún y los malos resultados y el mal momento del equipo, la afición en el partido contra Alianza llenó el estadio para alentar al más popular; no cabe duda que es un:
¡SENTIMIENTO AGUILUCHO!
