Blog

¿Quién manda a quién?

Rafael Franco/Psicólogo/Máster en Psicología Clínica/Colaborador

rafaelfranco@psijira.com

Fotografía: Albamar psicología

La mayoría de las personas no controla sus pensamientos de forma activa y deliberada; tenga en cuenta que su mente puede ser comparada con un cachorro salvaje, si lo deja ser, seguramente hará múltiples destrozos, más si poco a poco lo entrena, será fuente de alegrías. De esta forma los pensamientos o nos generan bienestar o sufrimiento.

Si se pusiera a alguien en un tanque de privación sensorial donde no hay experiencias externas, este pronto comenzará a generar experiencias internas, pensamientos para compensar la falta de estímulos.

Así, por ejemplo ¿no le ha sucedido alguna vez que anda por ahí muy tranquilo y de súbito su cerebro le manda una imagen o pensamiento sobre un pasado triste o sobre un futuro trágico? Es decir, que parece que no es suficiente lidiar con los eventos estresantes del día al día, del aquí y ahora.

Si deja que sus pensamientos sigan en “estado salvaje”, es decir sin control, seguro llegará su hora de dormir y no podrá lograrlo, tenemos “el poder” de preocuparnos mucho tiempo antes de que las cosas “puedan suceder”. Es como si su cerebro estuviera diciendo “hagámoslo de nuevo, tenemos una hora para almorzar pensemos en algo realmente deprimente o las cosas van realmente bien, pensemos en que puede salir mal.”

Aprender a identificar los pensamientos que nos generan malestar es el primer paso para “domesticarlos”. Muchas veces tendemos a generalizar y hacer catastróficos eventos cotidianos,  ubicarlos como lo que son: pensamientos, será de ayuda para que nosotros tengamos control sobre los pensamientos y no ellos sobre nosotros.

Etiquetas

Redacción UNIVO NEWS

Equipo de periodistas, estudiantes, editores y productores de la Carrera de Comunicaciones de la Universidad de Oriente UNIVO.
Botón volver arriba
Cerrar