Natividad, 18 años caminando 5 kilómetros para dar clases
Fotografías: Yessica Ortez
Con mochila al hombro y antes de que el sol de sus primeros rayos de luz, Natividad del Carmen Aguilera sale desde su casa en caserío El Papalón, cantón Tulima, rumbo al Centro Escolar Caserío Los Zavala, en cantón Cordoncillo de Anamorós; son aproximadamente 5 kilómetros de distancia que tiene que recorrer a pie todos los días, lo cual le toma poco más de una hora hacerlo.
Por la mañana atiende a los niños de parvulario y primer grado, mientras que en la tarde cumple con el cargo de directora y se ocupa del trabajo administrativo y operacional de la escuela en la que labora desde el año 2002.
Carmen Aguilera inició trabajando en Centro Escolar del Caserío Los Zavala bajo la modalidad de Asociación Comunal de Educación (ACE) en la cual era las directivas de los centros educativos quienes hacían las contrataciones de maestros mediante el programa EDUCO. Durante 10 años laboró como maestra, hasta el 2012 cuando también asumió la dirección, la cual ha traído consigo nuevos desafíos y responsabilidades profesionales para ella. Actualmente tiene 18 años de laborar en la zona.
El largo camino que tiene que recorrer entre veredas, calles de tierra y cerros es adverso, sobre todo en invierno que a veces las tormentas le impiden retornar a su hogar y la obligan a pasar la noche en casa de alguien de la comunidad. Sin embargo, para Aguilera esto pasa a segundo plano pues comenta que su satisfacción es convivir con la comunidad educativa y compartir sus conocimientos para formas niños y jóvenes que a futuro sean personas exitosas y de bien.
Esta rutina de caminar por horas hacia la escuela la hacia antes de la cuarentena , actualmente, atiende a grupos de niños a través de whatsapp, debe hacer videos y fotografías para enviarles y así facilitar el proceso de aprendizaje.
Cuando las clases presenciales fueron suspendidas, fue Natividad quien se desplazaba para imprimir las guías que los docentes elaboraban; actualmente envían las del Ministerio de Educación y Tecnologia a través de un comité de padres.
“Ser maestra para mi significa responsabilidad, paciencia, entusiasmo e interés por seguir ampliando mi formación profesional y así poder motivar a cada estudiante, buscando siempre lo mejor para ellos” comentó Aguilera.
El Centro Escolar Caserío Los Zavala está ubicado en una zona rural ubicada a unos 10 kilómetros de Santa Rosa de Lima, cuenta con una población de 63 estudiantes desde parvulario hasta noveno y funciona bajo el formato de multigrados, donde la maestra Yessica Ortez y el profesor Emilio Mejicano completan el cuerpo docente que los atiende.
Sus compañeros de trabajo describen a Aguilera como una persona humilde, con espíritu de servicio, responsable y comprometida con las mejoras del centro educativo. “Es alguien con gran liderazgo y siempre está con el deseo de superarse y adaptarse a los cambios del proceso educativo” comentó la maestra de matemáticas, Yessica Ortez.
Carmen Aguilera es un ejemplo que la vocación de servicio y amor por el trabajo de maestra están por encima de cualquier obstáculo; ella a través de su enseñanza se ha ganado el cariño y respeto de sus estudiantes, ex alumnos, padres y madres de familia de la zona.