Migueleños celebran 230 años de un milagro
Fotografía: Oscar Molina
Los feligreses católicos migueleños volvieron a abarrotar las calles, hoy celebraron 230 años de un milagro en el que creen devotamente, registrado el 21 de septiembre de 1787.
Según los historiadores, la Reina de La Paz, Patrona de El Salvador intercedió para que se detuviera la lava del volcán Chaparrastique que había entrado en erupción y que amenazaba con llegar a toda la ciudad; también narran que una palma formada por nubes se apareció en el cielo.
Desde entonces se realizan las tradicionales “bajadas” que son procesiones que se realizan desde cantones, barrios y colonias hacia la catedral; antes la primera se realizaba desde el cantón El Volcán, el 21 de septiembre hasta el 21 de noviembre, pero actualmente inician un mes antes pues participan decenas de comunidades.
Durante la procesión hasta la catedral basílica, los fieles acompañan la imagen con sus niños vestidos de indígenas, de sacerdotes o religiosas, manteniendo con ello la tradición de las bajadas.
El 21 de noviembre de 1921 la imagen recibió la coronación pontificia y el nombramiento papal de patrona de El Salvador.