Fotografías: AS
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El equipo que dirige Carlo Ancelotti sufrió pero al final sacó el resultado frente al Celta de Vigo.
560 días tuvieron que pasar para que el gigante europeo volviera a jugar un partido en su casa, en El Santiago Bernabéu, con remodelaciones pendientes de ejecutar, la casa blanca volvió a acoger un partido oficial del Real Madrid, frente al Celta de Vigo, compromiso correspondiente a la jornada 4 de la Liga Santander.
La pelotita comenzó a rodar a la 1:00 p. m. Centroamérica.
Los visitantes se ponían en ventaja tras el arranque del primer tiempo, Santi Mina logró vencer al guardameta blanco tras una serie de desaciertos de la defensa madrileña, los gallegos estaban arruinando la fiesta del Rea Madrid al Bernabéu.
El Celta de Vigo, tras ponerse en ventaja le cedió el control del balón a los de Ancelotti quienes durante los minutos siguientes intentaban dirigir el susto recibido en los primeros minutos. El juego de los merengues se tumbó hacia la banda de Vinícius Jr. y en unas de esas jugadas en asociación con Hazard, el belga sacó un zapatazo recio pero directo a las manos de Matías Dituro. El control de balón estaba bajo el cuadro merengue y los celtitas le apostaban a las contras, esa posición de la bola le dio el empate al Real Madrid al borde de la media hora del encuentro, Karim Benzema tras un pase de Federico Valverde venció la cabaña celeste y puso el 1 – 1.
Todo el fútbol del Celta de Vigo estaba pasando por los pies de Iago Aspas y en un contragolpe de esos iba venir el segundo para el cuadro que hoy vestía de rojo, fue Aspas el que inició jugada, descargó el balón con Hugo Mayo y este asistió a Franco Cervi, nuevamente vencían a Thibaut Courtois y equipo gallego se ponía en ventaja al minuto 31’ 2 – 1. Dos disparo para el Celta, dos goles y una efectividad de 100%.
Seguido del segundo de los visitante y en una acción a balón parado, Modrić puso la pelota en movimiento buscando a Casemiro, el brasileño asistió a Benzema para que anotara su doblete y el empate, pero la acción era anulada por fuera de lugar.
En el regreso al Santiago Bernabéu y tras finalizar la primera mitad, los vigueses lo estaban ganando por marcador de 2 – 1 por dos descuidos del cuadro merengue. Iago Aspas fue una piedra en el zapato para la saga defensiva del Real Madrid, cada vez que este tocaba el balón terminaba generando peligro y fue participante de los dos goles del Celta.
En la segunda mitad fueron los dirigidos por Eduardo Coudet los que entraron demasiado fríos y cuando no había pasado ni el primer minuto, Miguel Gutiérrez le puso un centro medido y justo para que Benzema lo rematara de cabeza y ahora sí, era el empate para el Real Madrid.
Los locales se encontraban mejor y estaban generando peligro, Vinícius, quien había ido de más a menos, en la segunda mitad volvería a aparecer como en los tramos iniciales de los 45 minutos anteriores. Y a pase de Benzema, el mediocampista brasileño se marchaba en velocidad y en total soledad por la banda izquierda, acción que significaba el tercero y la remontada para los merengues, 3 – 2. Tanta fue la euforia del gol anotado, que Vinícius se fue hasta las gradas del Bernabéu, a celebrarlo con la afición que regresó a la casa blanca, rompiendo las medidas de bioseguridad y ganándose una tarjeta amarilla por la infracción.
Tras encontrarse arriba en el marcador por primera vez en el partido, Carlo Ancelotti realizaba el primer cambio, salía Hazard y entraba para su debut Eduardo Camavinga. El joven francés de 18 años no tenía ni diez minutos en el terreno de juego y ya marcaba su primer gol con la camiseta blanca, un rebote que dio Matías Dituro tras un disparo de Luca Modrić, el recién ingresado marcó el cuarto para los merengues y lo estaba haciendo en su primer partido como jugador del Real Madrid.
El partido se tornaba resuelto a favor del Madrid, quienes estaban siendo los dueños y amos de la segunda mitad ganándolo ya por una ventaja de 4 – 2. A los 79 minutos salía Modrić, bajo una ovación de alrededor de 22, 000 aficionados presentes en la casa blanca y en su lugar entraba Marco Ascencio.
El Celta de Vigo no fue el de la primera mitad, sufrieron la velocidad y la verticalidad del cuadro blanco. Una jugada de contragolpe acabó con un penal sobre el incontenible Vinícius Jr. y sería Benzema el encargado de cobrar la pena máxima para marcar el 5 – 2 y su hat trick.
Finalizó el encuentro en el renovado Santiago Bernabéu con goleada, triplete de Benzema, una actuación de peliculezca con gol incluido por parte de Vinícius y otro tanto de Camavinga, le dieron la victoria al cuadro merengue, resultado que los coloca como líder provisional de La Liga con 10 puntos.
Por su parte el Celta de Vigo se diluyó en la segunda mitad, Iago Aspas ya no marcó diferencia al igual que Santi Mina y Hugo Mayo. Los de Coudet siguen peleados con el triunfo y apenas han podido conseguir 1 punto de 12 posibles.