El carisma, profesionalismo y ética de Alirio Mena, le han valido el reconocimiento de la sociedad
Por: Israel Majano
“Fui mariscal del desfile de la hispanidad en Nueva York, y, me dice una señora: mira que lujo te das vos Alirio. Porque el desfile recorrió toda la avenida principal, ahí iban todos los países del mundo, desfilando con sus reinas y carrozas, y cada quien llevaba su mariscal al que le habían asignado, para mí fue un honor, haber compartido y desfilar donde solo desfila el presidente de Estados Unidos, en la quinta avenida”, describe emocionado Alirio Mena, recordando ese pasaje de su vida.
Rolando Alirio Mena, reconocido escritor, director de radio Carnaval, colaborador en el comité de festejo en la ciudad migueleña que tanto ama. Nació el 2 de octubre de 1945, en la fresca y pintoresca ciudad de Cojutepeque, actualmente vive en San Miguel donde formó su hogar y ha trabajado por su desarrollo a lo largo de los años.
Junto con su difunta esposa Victoria Lisbeth Ibáñez de Mena (QDDG), trajeron al mundo a Lili Mena y a Rolo Mena, lastimosamente su hijo perdió la vida en un accidente de tránsito, con tristeza Alirio narra lo sucedido…
“Él tenia habilidades en la computación, me ayudaba a diagramar las revistas que trabajamos juntos, desgraciadamente saliendo de la universidad que lo mataron, venia en su moto y un camión no respetó el alto, es uno de los grandes dolores que he llevado”…
Luego de ese suceso para Alirio sigue el dolor, pues a los 3 años de la pérdida de su hijo murió su amada esposa. No obstante, él reconoce que a pesar de toda la tristeza que ha pasado ha tenido muchas alegrías en San Miguel.
“He sido miembro del comité de festejos de la ciudad durante muchos años, casi 40, aquí han pasado alcaldes de uno y otro partido, pero como yo a la política prácticamente hago lo que hacen los toros con el torero… solo la veo pasar”, afirma sonriente.
Mena mencionó que ama la política, pero que en nuestro país no se juega bien dicho rol y eso lo ha hecho mantenerse al margen de participar.
Sentado en un sofá de su casa, al lado de una montaña de papeles que guardan muchas de sus memorias en su larga carrera, comenzó a contar cómo inició en el mundo de la locución y parte de su niñez al lado de su abuela, pues prácticamente fue su segunda madre, al separarse sus padres.
Inició sus estudios en la escuela Candelario Cuella, También realizó su educación media en el Instituto Walter Thilo Deininger, en de su natal municipio.
“Quise ingresar a la Universidad Nacional, cuando salí de bachiller, pero la situación para entrar era muy difícil, recibían a unos 300 o 400 alumnos por año en ese tiempo, le estoy hablando allá por la época de los 60”, con emoción recuerda parte de su juventud, coment{o que la mayoría que entraba a la Universidad de El Salvador, eran por ser hijo de militares, de médicos, abogados, por eso no pudo realizarse como estudiante universitario.
Lo que en su momento vio como una puerta cerrada, abriría muchas más, como… la pasión por la lectura, “comencé a leer, pues tuve la dicha de tener maestros dentro de mi familia, y todos me indicaban que una de las cosas del hombre es la lectura para salir adelante en todo”.
Practicar la lectura resultó favorable para el joven Alirio, pues eso le brindó la oportunidad de ingresar en la Radio en Cojutequepe en 1960, fueron los inicios en lo que marcaría una gran trayectoria como locutor.
“Comencé en el programa presentando canciones, luego me gustaba el arte también, y hacia fonomímica en algunos eventos de las escuelas, yo era presentador, y eso me fue guiando hasta presentarme en algunos programas de televisión de aquel tiempo”.
Debido a sus actitudes se le brindó la oportunidad de comenzar a participar en un programa llamado “Buscando Estrellas”, transmitido en canal 2 en 1984, “participé y llegué hasta la final siempre haciendo fonomímica cómicas de personajes de moda en aquel tiempo”.
Su recorrido en el programa le permitió quedarse en la parte artística con varias radios de San Salvador, como YSAX la voz panamericana, que era una radio de los Sacerdotes, luego estuvo trabajando en radio Vanguardia, en la YSKL en los espacios juveniles.
Ahí fue donde comenzó su vida en radio, haciendo sonar su nombre en todo el país, se convirtió en una parte de la sociedad en lo artístico, luego por influencia de un primo que al igual que Alirio no vivía con sus padres, lo comenzó a involucrar en el mundo del futbol como espectador.
“Le ayudaba a él a lustrarle los tacos de aquel tiempo que eran de cuero, le arreglaba el uniforme, y ahí andaba yo con los equipos, incluso fue llamado a pertenecer a Club Deportivo Águila aquí en San Miguel, eso me hizo irme afincado aquí en la ciudad, ya prácticamente se me abrió el campo de la locución en la población migueleña”.
Las oportunidades comenzaron a llegar en la locución, fue director en su momento de radios reconocidas en la ciudad de San Miguel, todo su trabajo lo ha llevado a obtener múltiples reconocimientos por su labor en la locución.
Ha logrado apoyar las áreas de cultura, educación, deporte y ayuda social, esto en instituciones como la Cruz Roja, en actividades coordinadas para recaudar fondos en los tiempos del conflicto armado en el país.
Sus acciones lo han llevado a ser el director de Radio Carnaval, donde me aseguró que se siente identificado, porque la han dirigido al pueblo…
“Cuando los terremotos y las inundaciones en la Salvador, fuimos a tocar las puertas de Washington, Dallas, Los Ángeles, y logramos recaudar casi medio millón de dólares, para traer a Chilanguera, hicimos 10 casas a las familias que se vieron afectadas por los desastres naturales, compramos juguetes para repartirlos a los niños de esas comunidades, además, productos de la canasta básica para apoyar a todos los sectores que estaban desposeídos”, relató. Mena afirmó que la radio no es únicamente diversión, es también contribución a las causas de los pueblos.
Hace algunos años decide comenzar a contribuir a la ciudad que tanto le ha brindado en su vida, y lo hace por medio del rescate histórico de los patrimonios que cuenta San Miguel.
“Junto con mi hijo Rolo, decidimos comenzar a trabajar revistas, una de ellas es San Miguel histórico, y espero terminar mi libro la verdadera historia de San Miguel, ahí me di la tarea de explorar a fondo los hechos y visitar las comunidades involucradas para conocer más”, dijo.
Rodeado de muchos documentos un poco antiguos, pero bien cuidados se encuentra un apartado en la sala de su casa, una vieja librera con sus libros y un estante con sus reconocimientos, que quien llega se siente afortunado de estar en la casa de una mente tan brillante y admirable, tanto en la escritura como en la locución.
Para sus compañeros de trabajo y conocidos, “Don Alirio” como ellos lo llaman, es una biblioteca andante, pues sus conocimientos en historia y temas que le interrogan, siempre sabe que responder, además, “es amable y siembre sonríe cuando te cuenta sus experiencias”, me dijo una de sus compañeras de trabajo.
Alirio a sus 75 años continúa trabajando en lo que tanto ama, la Radio, la escritura, y el conocer su entorno histórico. Ha demostrado que es un gran historiador y con ello ha trabajado y contribuido al recate de la memoria histórica de su querido San Miguel y dejar un legado en la locución.
