Persiste migración irregular a Estados Unidos
La migración interna no es atendida por falta de financiamiento
fotos ilustración: Mauricio Portillo/Brenda Flores Nelson Rivera/Judith Molina
Reporteo y redacción: Kriscia Raumundo/Claudia Ortiz/Yoselin Ascencio/Jennifer Nativí/Oscar Hernández/Elías Aguilar/Brígida Medrano/Diana Quintanilla/Prisila Argueta/Oscar Hernández Raymundo.
Aunque no hay un censo actualizado para saber con exactitud cuántos salvadoreños están en los Estados Unidos o en otros países, las estimaciones indican que dos millones y medio de salvadoreños residen fuera de su país, lo que supone que uno de cada cuatro salvadoreños está radicado fuera de las fronteras nacionales. Los cálculos del Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador, indican, un 94 % de la población salvadoreña en el exterior, reside en los Estados Unidos concentrándose principalmente en los estados de California, Texas, Nueva York, Maryland y el Distrito de Columbia. Pero también hay salvadoreños en Canadá, Guatemala, Costa Rica y Australia.
¿Pero que hace que el salvadoreño no se desarrolle en su propio país, que hay detrás de la migración?
Los jóvenes que están entre los 15 a 18 años son los más propensos a caer en la desesperación y la falta de oportunidades laborales o la dificultad de seguir en la universidad se suman a la causa, la Universidad de Oriente UNIVO ha hecho el lanzamiento de la campaña: “No te arriesgues, con el fin de promover el estudio universitario como uno de los más grandes retos, pero a su vez el inicio de soluciones a la problemática del país en el que la delincuencia, la crisis económica, el desempleo vulneralizan, a los que si pudieran cambiarían el sentido del país.
En el departamento de Morazán reside Carlos E. , estudiante del Instituto Nacional de Gotera, cursa primer año de bachillerato en Software.
Carlos tiene dos hermanas que aún estudian primaria, su padre que es mecánico y su madre, quien se dedica a los oficios domésticos; él, a pesar de que tienen familiares en Estados Unidos no recibe mucha ayuda económica, salvo por las veces que les han mandado para “la navidad”; él, al igual que muchos de sus compañeros sueñan con un día trabajar y poder ayudar a sus padres en agradecimiento por todo lo que han hecho por ellos, “lástima que en este país no hay oportunidades”, dice desesperanzado, por lo que dice que si sus tíos le ofrecieran irse, lo haría sin pensarlo dos veces..
El joven sabe que en Estados Unidos se gana más y tendría más oportunidades de trabajo que en su propio país, y pese a conocer una la historia de alguien que se expuso a emigrar, que es muy peligroso, y que se corre el riesgo de no llegar, que muchos mueren, y Carlos considera que aunque quizá no sea la mejor elección, “la necesidad de superarse es el sueño de muchas personas”. y continúa diciendo: “la verdad no importa arriesgarme, porque a pesar de las dificultades que muchos han pasado, han podido lograr superarse y vale la pena intentarlo”
Investigación sobre migración
La Universidad de Oriente (UNIVO), desarrolla una investigación sobre la migración a través del programa “No te Arriesgues” coordinado por Angélica María Sosa.
“Surge la propuesta de la Embajada De Estados Unidos y el Ministerio de Relaciones Exteriores, para realizar un trabajo en conjunto, buscado la forma de identificar cual es el grupo más susceptible de emigrar y que en su mayoría buscan hacerlo ilegalmente, esto es la migración irregular y coincidimos en la edad de promedio que un Salvadoreño emigra.
Empezamos de bachillerato ya que a esa edad la mayoría de jóvenes deciden migrar por que comienzan a pensar si voy a seguir estudiando, o en qué universidad voy a estudiar y en donde voy a trabajar o quizás no voy a estudiar , no quiero estudiar… bueno muchos lazos de ideas que se nos en ese transcurso de tiempo bastante trascendental en la vida de las personas entonces nos enfocamos en ellos, el programa actualmente lo estamos trabando no lo hemos concluido aún que estamos en las partes finales” comentó..
El programa se enfoca en 10 centros escolares de la zona oriental, entre los que se encuentran: Aminta de Montiel, Instituto de Ciudad Barrios e Instituto de Usulután.
“Comenzamos a desarrollar las ideas a los jóvenes para que ellos conozcan sobre las causas que se dan por los medios de comunicación para emigrar y les ofrecemos una nueva perspectiva para poder quedarse y desarrollarse intelectualmente preparándose para el campo laboral en su país y cerca de su familia; en este caso damos a conocer la posibilidad de aplicar para una media beca o meca completa en la UNIVO” comentó Sosa.
Migración interna temporal
Además del esfuerzo por detener el flujo de personas que salen del país, hay organizaciones no gubernamentales que tienen experiencia en el tema de emigración, pero por no tener suficiente presupuesto no siguen en el rol que habían asumido.
Karla María Cruz se especializado en derechos humanos y población migrante. Ha trabajado en Cáritas, en la Pastoral de Movilidad Humana durante 7 años, luego con la organización internacional Save the Children en el tema de niñez migrante.
Caritas un organismo de la pastoral social de la Iglesia Católica, en San Miguel, trabajó el tema del migrante desde el movimiento de población humana, porque el departamento es una zona de altos flujos migratorios.
Los especialistas consideran que hay movilización de tránsito y migración de destinos, es decir que vienen personas de otros destinos a este lugar, entonces el trabajo de la pastoral es atender las necesidades de estas personas que habían escogido este lugar, a sus familias por igual.
Desde la pastoral se hicieron diagnósticos, para conocer la situación actual de acceso a derechos, de donde se ubican, cuales son las condiciones laborales que se encuentran y poner al descubierto que zona oriental tiene alto movimiento de población migrante y mucha es circular o temporal, solo vienen a trabajar uno o dos meses y luego regresan, explica la experta.
Últimamente ha aumentado esta dinámica, por la situación de violencia en el país, muchas personas que ya estaban radicadas, que ya tenían su residencia, se movilizaron de regreso, ahora la dinámica es mucho más temporal, se establecen un mes, dos meses, tres meses y regresaban, no quieren establecerse por la misma situación, comentó.
“Otra información que manejamos es el tema laboral y eso implicaba que esta población era generalmente vulnerada, porque no existía un contrato laboral, los empleados no cumplían las situaciones básicas, como el día de descanso que al ser migrantes se abusaba sobre todo cuando la persona quería pedir permiso cuando querían ir a Nicaragua o Honduras y Guatemala.
Bajo esa misma situación había mucho abuso, pero también identificamos que no hay una denuncia formal, si no que el Ministerio de Trabajo recibe estas consultas, pero al final no se concretizaba nada, no existe un registro formal, no existe a nivel de embajada, llevan un control que está a nivel del país, pero por el momento no está estipulado” manifestó Cruz.
Uno de los grupos vulnerables que migra son los niños, según la experiencia de Cáritas, estos lo hacen por situaciones familiares, o por violencia..
La organización se enfocó en el tema educativo, jornadas de formación para las personas migrantes, para que se organizaran en estructuras comunitarias, derechos y deberes.
De acuerdo con la especialista, se trabajó el componente de incidencia, a nivel de instituciones locales para abordar el trabajo comunitario, el apoyo a las personas migrantes y se trató de hacer incidencia, bajo decreto legislativo, para extensión de cuotas en el trámite de residencias.
También trabajaron el componente de acompañamiento legal, para gestionar residencia temporal o procesos de penalización; se abordó el tema de acompañamiento especifico en gestión de documentos, también el tema de la economía familiar.
“En todo el trabajo con la población migrante, nosotros trabajábamos de la mano con migración y extranjería y las embajadas de los países que tenían más representación de población migrante, que son embajada de Nicaragua y Honduras; coordinábamos, teníamos una carta entendimiento en el que ellos documentaban a su población, uno de los problemas más grandes de la población migrante acá, es que no cuentan con sus documentos del país de origen, mientras no tengan ese documento, no pueden obtener documentos aunque tengan 20 o 30 años y tengan 10 hijos” explica.
Si todos trabajamos unidos esto cambiará, si nos ayudamos jamás la emigración será lo adecuado” Gabriel Argueta, Vicario parroquia de Ciudad Barrios
Cáritas gestionó por unos años los consulados móviles, para que las personas de se ahorraran el viaje, los pasajes y la comida.
Para Santos Gabriel Argueta, Vicario de la parroquia San Pedro Apóstol de Ciudad Barrios es lamentable la migración de salvadoreños y de personas de otros países, “La Iglesia lamenta tal situación que la patria expulse a sus propios hijos porque no les puede dar lo necesario para para que pueda sobrevivir. Exijamos que haya propias fuentes de trabajo. Es doloroso como iglesia, como sacerdote observar familias rotas por tanta delincuencia en el país que orilla a que muchos dejen su patria, pero si todos trabajamos unidos esto cambiará, si nos ayudamos jamás la emigración será lo adecuado”