En 1981 un grupo conocido como Club Rotario de la ciudad de San Miguel, decidió dar vida a la Universidad de Oriente (UNIVO), con la finalidad de beneficiar a la zona oriental de El Salvador, iniciando sus labores educativas el 3 de febrero de 1982.
La primera infraestructura de la UNIVO se ubicó en el centro histórico de la ciudad de San Miguel, es así como empieza a tener sus modificaciones. Progresivamente se va proyectando para poder distribuir el espacio físico según las necesidades que se tenían con la oferta académica del momento. Además, se va programando y va mejorando con el crecimiento de la población estudiantil, según narró Francisco Zuleta, Decano de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura.
Sobre la 4a. Calle Poniente No. 705 se encuentra actualmente el edificio educativo conocido como la sede central, este consta de cinco niveles, una biblioteca de tres pisos donde se les brinda a los estudiantes un lugar para la revisión de literatura y otro para realizar tareas, existe además parqueo, sala de docentes con ambiente agradable, aulas con equipos tecnológicos y salas de tecnología, que brindan las condiciones óptimas para el aprendizaje.
Aunque no siempre lució así, este edificio que es emblemático para la entidad, ha ido creciendo y mejorando su infraestructura.
Las autoridades universitarias comenzaron a proyectarse para brindar más y mejores espacios por lo que iniciaron la compra de terrenos para adecuarlos a la demanda de las carreras que se brindan; es así como se adquirió el Campus Jaguar de Piedra, el cual se encuentra en la ciudad de Quelepa, lugar vecino de las conocidas ruinas de lo que fue un asentamiento precolombino y que representa un elemento simbólico para la región oriental.
Luego, la Junta de Directores y el Consejo Consultivo, ven la necesidad y los elementos de desarrollo de la universidad, es así como toman a bien ampliar el espacio físico ya que en su inicio solo se contaba con el sector donde actualmente se ingresa y las canchas deportivas; hicieron la compra de otro inmueble que pertenecía a la ex fábrica SALVAMEX, ampliando así el campus.
Al comprar el sitio donde antes se fabricaron sacos de henequén, la UNIVO empieza a crecer y el terreno dio la posibilidad de llevar a cabo muchos cambios de infraestructura física, aulas acondicionadas, equipamiento, piso cerámico, encielado, techos acústicos, iluminación, después se desarrollaron áreas como el estacionamiento, laboratorios especializados.
Los estudiantes también se sienten beneficiados con los cambios que el campus ha ido teniendo con el paso de los años: “Desde la primera vez que vine, si he visto varios cambios” manifestó Carlos Rojas, estudiante de Ingeniería Civil, también por las modificaciones en general y otras que van relacionadas a su carrera han tenido avances y que son las que le permitieron tomar la decisión de estudiar en esta universidad.
De igual forma, Eduardo Díaz también estudiante de Ingeniería Civil, decidió estudiar en Jaguar de Piedra por la accesibilidad a las prácticas que se dan en su carrera, “siento que aquí es más avanzado en comparación a otras universidades, me motivó más el estudio de suelos y los laboratorios”.
El campus cuenta además con el auditórium “Jaguar de Piedra”, el cual se toma como un referente, “la universidad se siente orgullosa de tenerlo” manifestó Zuleta; este tiene capacidad para ochocientas personas.
En cuanto a la infraestructura deportiva, el especialista hizo mención de las canchas de fútbol, las cuales tienen las medidas reglamentarias a nivel profesional; también se cuenta con espacios para el básquetbol, una piscina semiolímpica, mesas de pimpón, entre otras mejoras que se han ido implementando y han tenido auge en la infraestructura del campus.
Zuleta mencionó que el desarrollo de la infraestructura ya está definido; sin embargo, aclara que el proceso lleva un lineamiento, es por eso que cada área tiene sus modificaciones que se van a implementar.
El foodcourt es otro de los proyectos avanzados de la UNIVO en el campus, con esta construcción pretenden darle una nueva modalidad, mejor atención al usuario, accesibilidad y que éste cumpla con las necesidades de estudiantes, docentes y personal administrativo. Según los cálculos de los expertos este proyecto pronto estará listo, “para que se realice en el tiempo estipulado están trabajando dos grupos uno de día y el otro de noche” comentó Zuleta.
Además de estos espacios, la UNIVO cuenta con el campo experimental en cantón Anchico, donde actualmente se desarrollan las prácticas para veterinaria, agricultura, fitotecnia , zootecnia y otros.
La UNIVO desde su fundación, se ha ido desarrollando y creciendo en infraestructura, se han sumado elementos arquitectónicos de la actualidad y se han creado espacios que ayudan a la comunidad educativa a crecer en materia de tecnología, investigación, deportes, y en materia académica.
Cuando estudiar es lo primero
Cuando las calles de los pueblos migueleños aún eran polvorientos y llegar hasta la ciudad de San Miguel era un verdadero martirio, muchos estudiantes buscaban donde quedarse para poder terminar sus estudios o desistían de la formación superior.
Ethel Penado de Véliz, una de las docentes de la UNIVO con dos décadas en la entidad, relató que siempre recuerda el esfuerzo de una de sus estudiantes, quien tuvo que comprar una yegua para lograr transportarse hasta San Miguel; esta era amarrada frente a la universidad y antes de volver al camino de regreso era alimentada.
Véliz mencionó que encontrar a los estudiantes graduados y ya no hablar de docente a alumno sino de profesional a profesional, “es gratificante”.
Actualmente la infraestructura vial hace más fácil poder llegar a San Miguel y las instalaciones de la UNIVO brindan además la comodidad y tecnología que cada estudiante necesita para superarse y lograr sus sueños, aseguró la docente.
«Con la ampliación de espacios físicos se pretende que el campus vaya creciendo de acuerdo a las necesidades de los tiempos y de las que cada facultad vaya demandando” Francisco Zuleta, Decano Facultad de Ingeniería y Arquitectura.
