El día de difuntos es una oportunidad para muchos para obtener dinero a cambio de pintar cruces o lavar tumbas
Por: Yessica Hernández
La soledad y el silencio del cementerio Municipal de Chinameca, San Miguel, termina con la llegada de las personas que van a enflorar a sus difuntos.
Los lugareños se preparan con antelación para poder visitarles el 2 de Noviembre fecha en la que conmemora el día de los difuntos.
«Tengo ya muchos años de venir al cementerio a limpiar tumbas, al principio solo venía para limpiar las de mis familiares, pero luego unos amigos me pidieron limpiar las suyas y dijeron que me pagarían, entonces pensé en ofrecerles mi ayuda a las personas que llegaban y así fue como empezó todo», relató Fausto Campos, un experto limpiador de tumbas.
El precio de la limpieza puede variar, hay desde $1 a $3, depediendo de como se encuentra esta, además también pinta las cruces y aunque solo es una vez al año, dicha actividad es un paliativo económico para él y su familia.
Pese a la pandemia se acercaron muchas perdonas a solicitar de su trabajo. “A pesar de esta situación que estamos enfrentando les invito a que no olvidemos a nuestros seres queridos, claro siempre manteniendo la distancia y las medidas de necesarias” expresó Campos.
En este día de los difuntos, en el campo santo de Chinameca solo se está permitiendo el ingreso de tres personas por familia quienes cuentan con una hora para realizar su actividad; también solo se les permitirá el ingreso personas mayores de edad, mientras que los niños, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad no tienen permitido el ingreso, de igual forma los vendedores ambulantes.
