Este jueves, inspectores de la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas (DGEHM) realizaron una revisión exhaustiva de 1,500 cilindros de gas licuado de petróleo (GLP) en una planta envasadora de gas propano, ubicada en San Juan Opico. El lote será distribuido y comercializado en el mercado nacional, cumpliendo con las normativas de seguridad establecidas por los Reglamentos Técnicos Centroamericanos (RTCA).
Por Anny Scarlet Martínez
El proceso de verificación incluyó una inspección visual para asegurar que los cilindros no presentaran golpes u otros daños externos que pudieran comprometer su uso. Asimismo, se comprobó que el taraje de cada cilindro estuviera conforme a las especificaciones del fabricante. Además de estas revisiones, se llevaron a cabo pruebas de laboratorio, como análisis de rayos X, medición de la capacidad volumétrica y verificación del espesor del acero para asegurar la integridad estructural de los cilindros.
Estas inspecciones se realizan con el propósito de garantizar que los cilindros de GLP que se comercializan en el mercado salvadoreño cumplan con los estándares de seguridad, protegiendo así a los usuarios de posibles incidentes. Se revisan tanto las condiciones físicas como técnicas de los cilindros para asegurar que sean seguros en su manipulación y uso doméstico o comercial.
Al concluir el procedimiento, la DGEHM informó que el lote inspeccionado cumple con los requisitos necesarios para su distribución. Los cilindros podrán ser llenados y puestos en circulación en el mercado salvadoreño.
Este tipo de inspecciones forman parte de un proceso continuo de control de calidad que busca prevenir accidentes relacionados con el uso de cilindros de GLP. La revisión de estos parámetros garantiza que los productos que ingresan al mercado cumplan con las normativas vigentes y ofrezcan un uso seguro a los consumidores en el país.
