Tras obtener el título de bicampeones en el torneo universitario a escala nacional, los futbolistas seleccionados de la Universidad de Oriente (UNIVO) se siguen preparando para triunfar por tercera vez.
Durante 10 años consecutivos la UNIVO ha brindado la oportunidad a los jóvenes deportistas para que puedan participar en el torneo universitario organizado por la Asociación Deportiva Universitaria Salvadoreña (ADUSAL). A pesar de eso, en los primeros 8 años no habían podido obtener el primer lugar debido a la fuerte competencia que se tiene a nivel oriental.
Para Alexander Prado, miembro de la selección de la UNIVO, uno de los equipos más difíciles de vencer era el de la Universidad Gerardo Barrios; sin embargo en 2015, con mucho empeño, esfuerzo y dedicación lograron superar el marcador sin ningún problema, pasando a competir a nivel nacional contra la Universidad Don Bosco, otro fuerte rival según el futbolista, a quienes vencieron 2 por 0, con la anotación de Ever Ramírez y Tomás Carranza, convirtiéndose así en los campeones de ese año.
Gracias a ese título, los jugadores se sintieron motivados para a seguir en la competencia y con ayuda de su entrenador Mauricio Torres, quien cuenta con 18 años de experiencia como técnico en las selecciones de la UNIVO, más la habilidad futbolísticas de cada uno de los miembros que integran el equipo, pudieron obtener un nuevo triunfo en el año 2016.
En esa ocasión disputaron la final contra la Universidad Matías Delgado, en la que el único gol del partido fue anotado por el volante creativo Oscar Gonzáles, quien le aseguró el gane a la selección oriental para convertirse en bicampeones nacionales, que a su vez les otorgaba el pase para participar en los Juegos Deportivos Universitarios Centroamericanos y del Caribe, con sede enVenezuela.
Sin embargo, a pesar de haber quedado seleccionado, el equipo no pudo viajar porque según el coordinador de deportes de la UNIVO, Mauricio Martínez, para llevar a cabo una disciplina tiene que haber cuórum mínimo de cuatro equipos, lo cual no se hizo posible debido a que otros países invitados no confirmaron su asistencia, sino que solo el equipo salvadoreño y el venezolano.
Aun así, el volante marcador, Elmer Gonzales, recuerda exactamente la emotividad de la final del torneo y muy conmovido expresó, “Cuando finalizó el partido sentí una alegría tremenda, desde antes había soñado qué se podía sentir, y gracias a Dios se nos dio ese triunfo. La verdad muchos de los compañeros y mi persona lloramos, porque no siempre se tiene la oportunidad de ganar”.
Ahora todos los miembros de la selección se encuentran preparando para obtener su tercer triunfo, porque aunque no pudieron viajar, están conscientes de que han hecho un gran trabajo futbolístico y cada vez tienen mayores aspiraciones.
Por tanto, su propósito para este año es poner nuevamente en alto a la Universidad de Oriente, al posicionarse entre los primeros lugares, y de la misma forma enfrentar los torneos locales con igual responsabilidad para que la selección siga creciendo.
Pero según el técnico Torres, para ello deben seguir todo un proceso, debido a que es necesario mejorar los aspectos físicos, técnicos, tácticos y psicológicos para enfrentar con éxito las diferentes condiciones que se presentan en el terreno de juego.
