Con creatividad y determinación, la joven emprendedora creó “Sueños Accesorios IR”, un negocio que la ha ayudado a crecer personal y profesionalmente.
Por Joselyn Orellana / F. Martínez
Lo que comenzó como un simple favor para una amiga se convirtió en el inicio de un emprendimiento con gran potencial. Ingrid Rivera, una joven apasionada por la creatividad, descubrió su talento para la bisutería cuando decidió reparar una pulsera dañada. Fascinada por el proceso, compró materiales y comenzó a crear más diseños. Así nació “Sueños Accesorios IR”, una marca que, en poco tiempo, ha logrado consolidarse en el mercado.
Los inicios no fueron fáciles. Rivera confiesa que uno de sus mayores temores era no lograr vender sus productos o que su idea no funcionara. Sin embargo, la buena recepción del público la motivó a seguir adelante. A través de redes sociales, como Instagram y Facebook bajo el nombre Pulseras.Stgo, logró posicionar sus accesorios y atraer clientes.
Además del crecimiento de su marca, su emprendimiento ha significado un apoyo fundamental en su vida, ya que le ha permitido financiar parte de sus estudios. A pesar de los desafíos, ha sabido sobreponerse a las dificultades y hoy, junto a su madre, cuenta con un stand en el Parque San Rafael en Santiago de María, donde cada fin de semana ofrece sus creaciones al público.
Con esfuerzo y dedicación, Ingrid Rivera ha logrado convertir su pasión en un negocio exitoso. Su historia es un ejemplo de cómo la perseverancia y el amor por lo que se hace pueden transformar una idea en una realidad.
