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El «Cinturón del Suicidio» en EE. UU

En septiembre de este año, en Rock Springs, Wyoming, una intersección se llenó de carteles en memoria de ciudadanos que decidieron quitarse la vida. “Extrañando por siempre a nuestro dulce niño de ojos azules” y “Papá, extrañarte es una tristeza que nunca se va” eran algunos de los mensajes que recordaban las pérdidas.

Por Anny Scarlet Martínez

El alcalde Max Mickelson, quien impulsó esta iniciativa en el mes de la prevención del suicidio, declaró que el suicidio es una realidad omnipresente en su ciudad. Sweetwater, el condado donde está ubicado Rock Springs, ha duplicado la tasa nacional de suicidios cada año desde 2019.

Rock Springs no es una excepción en esta problemática. La ciudad forma parte de una región conocida como el «Cinturón del Suicidio», que abarca ocho estados y concentra las tasas más altas de suicidios en Estados Unidos. En 2023, el país registró 49,316 muertes por suicidio, una cada 11 minutos.

April Thompson, una residente de la zona, perdió a su hijo Joshua en 2013, tras su regreso del ejército con Trastorno de Estrés Postraumático. Ocho años después, su sobrino Billy también se quitó la vida. Historias como la de April son comunes en esta región, donde la tasa de suicidios es alarmante y el duelo se vive a diario.

Los ocho estados que componen el «Cinturón del Suicidio» son Arizona, Colorado, Idaho, Montana, Nevada, Nuevo México, Utah y Wyoming. Si Wyoming y Montana fueran países, ocuparían los primeros lugares en tasas de suicidio a nivel mundial, según la OCDE. Los investigadores buscan entender las causas, y señalan la “cultura del honor” como un factor influyente, especialmente entre los hombres, que a menudo sienten que su valor está ligado a su independencia.

Amanda Wilson, terapeuta de Rock Springs, explica que la idea de masculinidad en esta región refuerza la noción de que pedir ayuda es una señal de debilidad. Esto, sumado a la falta de acceso a servicios de salud mental en áreas rurales, agrava el problema.

Kent Corso, experto en prevención del suicidio, sostiene que el suicidio no es solo una cuestión de salud mental, sino un asunto social. Considera que toda la comunidad debe involucrarse para encontrar soluciones, ya que las estadísticas revelan que en EE.UU. no hay una fuerte correlación entre las tasas de enfermedad mental y las de suicidio.

A pesar de los esfuerzos locales, como los eventos de prevención del suicidio liderados por el alcalde Mickelson, la crisis sigue creciendo. En los últimos 20 años, las tasas de suicidio en el país han aumentado más del 30%, y las armas de fuego son el método más común. Sin embargo, en los estados del Oeste Montañoso, endurecer el control de armas sigue siendo un tema tabú.

Wyoming y otros estados del «Cinturón del Suicidio» enfrentan una realidad compleja, agravada por el aislamiento, las duras condiciones climáticas y la arraigada cultura local. La conversación sobre el suicidio es constante, pero el desafío para reducir las cifras sigue siendo enorme.

UNIVO NEWS

Equipo de periodistas, estudiantes, editores y productores de la Carrera de Comunicaciones de la Universidad de Oriente UNIVO.

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