Seúl y otras regiones enfrentan una de las mayores nevadas en noviembre, con récords históricos de acumulación y afectaciones en transporte y servicios.
Por Anny Scarlet Martínez
Corea del Sur experimenta una intensa nevada que ha paralizado la capital, Seúl, y regiones cercanas. Hasta 40 centímetros de nieve se han acumulado en algunos puntos, lo que ha provocado la cancelación de más de cien vuelos, el cierre de operaciones de ferry y la suspensión de actividades en escuelas y guarderías.
La nevada, considerada la tercera más intensa en Seúl desde que se iniciaron registros en 1907, es la mayor en un mes de noviembre. Las autoridades locales desplegaron a 11.000 trabajadores para remover la nieve acumulada, mientras se reportaron 131 interrupciones temporales de electricidad en diversos puntos de la ciudad. Aunque la alerta de nevada ha sido levantada en la capital, persiste en otras zonas del país.
En la provincia de Gyeonggi, vecina a Seúl, más de mil escuelas permanecen cerradas, incluidas guarderías, mientras las autoridades trabajan para restablecer la normalidad. Expertos atribuyen esta nevada excepcional a la interacción entre temperaturas cálidas en los mares al oeste de la península y corrientes de aire frío que han generado condiciones extremas.
Incluso Corea del Norte ha registrado nevadas inusuales, con acumulaciones de más de 10 centímetros en algunas regiones. Aunque la intensidad comienza a disminuir, la histórica nevada sigue representando un desafío climático para toda la península coreana.
