Además de agricultor, Nicolás es carpintero y brinda empleo a sus vecinos
Por: Yeny Romero | Edición: Jairo Gómez
Nicolás Orellana tiene 50 años, es originario del cantón Llano El Ángel de Ciudad Barrios, San Miguel y siempre ha sido un hombre apasionado por la agricultura.
Cuando Orellana era joven, tuvo que salir del país debido a las condiciones económicas en que vivía su familia; sin embargo, hace algunos años regresó y actualmente vive en el cantón Valle Grande de San Simón, Morazán.
Él aseguró que prefiere vivir en el campo, porque es un lugar con mejores oportunidades, donde puede aprovechar su tiempo cultivando y trabajando en la carpintería, otro de sus oficios.
«A mí me gusta hacer de todo un poco, hoy busco dos trabajadores que les guste lo que hago, para que me puedan ayudar», comentó.
Nicolás relató que desde pequeño le encantaban las plantas y solía visitar los terrenos con su padre, y fue entonces que nació su amor por todo lo que proviene de la tierra, razón por la que convirtió el patio de su casa en una fuente de alimentos para su familia.
Allí cultiva hortalizas como: pipianes, ejotes, frijoles, entre otras. De esta forma obtiene todo fresco, sin necesidad de visitar el mercado, aseguró.
Es importante mencionar que el agricultor compra la semilla a otros productores, pues aseguró que esto permite mejores resultados en la cosecha.
«A mí me gusta mucho cultivar, incluso he compartido de la cosecha con mis vecinos… para que comiéramos todos; no lo he hecho como negocio, pero si me buscan, yo vendo’’, explicó.
A futuro, Orellana espera ampliar su huerto y brindar más empleos a sus vecinos, y así proteger la seguridad alimentaria de las familias.
