La Selección Mexicana demostró un manejo superior del partido y selló su pase al Final Four de la Nations League tras vencer contundentemente a Honduras, en un encuentro celebrado en el Estadio Nemesio Díez.
Por Luis Hernández
En una noche de fútbol convincente, la Selección Mexicana dejó atrás las dudas y mostró su verdadero potencial al golear 4-0 a Honduras, en un partido que evidenció la superioridad del equipo dirigido por Javier Aguirre. A diferencia del encuentro de ida en San Pedro Sula, donde México tuvo que remontar un 2-0, esta vez los catrachos desaparecieron del campo, dejando a los 26,898 aficionados presentes en el estadio con un sentimiento de tranquilidad.
El primer gol llegó al minuto 42, cuando Raúl Jiménez, a través de una brillante jugada de Jesús Orozco, rompió el hielo y dio inicio a la fiesta goleadora. La segunda mitad fue un desfile de buen fútbol; Henry Martín se convirtió en la figura del encuentro al anotar un doblete (72’ y 90+3’), mientras que Jorge Sánchez también se sumó a la fiesta con un tanto al minuto 84.
Este triunfo no solo calma las tensiones que rodeaban al equipo, sino que también reafirma el liderazgo del “Vasco” Aguirre, quien, tras realizar ocho modificaciones en la alineación, encontró una fórmula ganadora. México evita así el repechaje a la Copa Oro y se posiciona como un firme contendiente en la búsqueda de un título que aún se le escapa. Con esta victoria, el combinado nacional retoma la armonía y demuestra que, a pesar de las adversidades, sigue siendo el Gigante de la CONCACAF.