El Papa enfrenta un cuadro clínico complicado, pero mantiene su labor pastoral.
Por F. Martínez
El Papa Francisco se encuentra actualmente hospitalizado en el Policlínico Romano debido a una «infección polimicrobiana», una condición médica compleja que ha requerido ajustes en su tratamiento. Según el último comunicado de la Oficina de Prensa del Vaticano, las pruebas realizadas han confirmado un cuadro clínico delicado, lo que obligó a modificar su terapia y mantenerlo bajo observación en un entorno adecuado.
A pesar de su estado de salud, el Pontífice no ha dejado de mantener contacto diario con la parroquia de Gaza, demostrando su firme compromiso con las víctimas del conflicto en la región. El Papa sigue de cerca la situación y continúa mostrando su apoyo espiritual a quienes más lo necesitan.
El Vaticano ha asegurado que se seguirán proporcionando detalles sobre su evolución médica y han solicitado a los fieles rezar por su pronta recuperación, así como por la paz en el mundo.
