
El club migueleño comparte grupo con Olimpia, Xelajú, Real Estelí y Hércules, y se plantea superar su actuación del año pasado.
Por Luis Hernández
Águila ya conoce el camino que deberá recorrer en la Copa Centroamericana 2025. El sorteo realizado recientemente ubicó al equipo migueleño en el Grupo D, junto a rivales de peso como Olimpia (Honduras), Xelajú (Guatemala), Real Estelí (Nicaragua) y Hércules (El Salvador).
El gerente general del club, Amílcar Mijangos, expresó la ambición con la que afrontan esta nueva edición del torneo.
“Es un torneo de mucha exigencia. Debemos contar con un plantel competitivo y mejor preparado. En 2024 fuimos líderes en la fase inicial, pero ahora queremos avanzar más allá. El reto es grande, como en 1977, cuando fuimos campeones”, señaló.
El dirigente también subrayó la meta de trascender más allá de la primera ronda:
“Queremos ser el primer equipo salvadoreño en llegar a instancias más avanzadas. No basta con clasificar; buscamos dejar huella en el torneo”.
Sobre el duelo ante Hércules, otro club salvadoreño del grupo, Mijangos cree que el conocimiento mutuo podría marcar diferencia:
“Conocer al rival puede ser una ventaja. No es exceso de confianza, pero sí una oportunidad frente a equipos extranjeros que suelen reforzarse más. Además, jugar en casa siempre es un punto a favor”.
De cara a la competencia, el club ya se encuentra en fase de reestructuración.
“Estamos evaluando altas y bajas. El cuerpo técnico ha solicitado refuerzos en varias líneas. Queremos elevar el nivel del equipo y traer jugadores que realmente marquen diferencia”, explicó.
Con objetivos claros y una visión ambiciosa, Águila se alista para una nueva aventura internacional. La misión: competir, avanzar y volver a poner el nombre del fútbol salvadoreño en lo más alto del istmo.