
Cada 22 de abril, el planeta nos recuerda que cuidar el medio ambiente no es una opción, es una necesidad urgente. Este Día de la Tierra, el llamado es claro: menos plástico, más conciencia.
Por F. Martínez
En un contexto global marcado por el cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad, el Día de la Tierra 2025 cobra un significado especial. Con el lema “Planeta vs. Plásticos”, la campaña de este año se enfoca en uno de los desafíos más críticos de nuestro tiempo: la contaminación por plásticos.
Según datos de la ONU, más del 50% del plástico que producimos es de un solo uso, y gran parte termina en océanos, ríos o vertederos, afectando ecosistemas enteros. Pero esta crisis no es solo ambiental, también es social y económica.
En distintas partes del país (puedes poner aquí tu ciudad o localidad), escuelas, organizaciones y voluntarios se han unido para conmemorar esta fecha con acciones concretas: jornadas de reforestación, charlas educativas, talleres de reciclaje, limpiezas de playas y ríos, entre otras actividades.
“Cuidar la Tierra empieza por lo que hacemos cada día”, comenta Laura Pérez, estudiante y activista ambiental. “No podemos esperar que los gobiernos lo hagan todo. También nos toca a nosotros.”
El mensaje es claro: cada pequeña acción suma. Cambiar nuestros hábitos de consumo, reducir el uso de plásticos, reutilizar y reciclar no son solo modas ecológicas, son formas reales de marcar la diferencia.
Este Día de la Tierra no debería quedarse en una fecha más en el calendario. Es una oportunidad para reconectar con el planeta, para escuchar lo que nos está diciendo y, sobre todo, para actuar.
Porque el futuro no está escrito, pero sí está en nuestras manos.