El lateral brasileño Marcelo Vieira da Silva, quien brilló durante dieciséis temporadas en el Real Madrid y recientemente rescindió su contrato con el Fluminense, ha decidido colgar las botas, dejando un legado imborrable en el deporte rey.
Por Luis Hernández
En un emotivo video compartido en redes sociales, Marcelo, de 35 años, reflexionó sobre su carrera y agradeció a su abuelo Pedro, quien lo impulsó a convertirse en futbolista. “Mi amor por el fútbol viene por mi abuelo. Él quería que yo fuera futbolista profesional”, recordó el jugador, que llegó al Real Madrid a los 18 años y se convirtió en uno de sus capitanes. Durante su etapa en el club español, acumuló 25 títulos, incluyendo 5 Champions League, y se consolidó como una leyenda del equipo.
Marcelo también expresó su gratitud por representar a la selección brasileña, con la que obtuvo dos medallas olímpicas y una Copa Confederaciones. Su regreso al Fluminense, donde comenzó y culminó su carrera, fue una forma de retribuir al club que lo vio nacer futbolísticamente, logrando tres títulos y dejando un legado para las futuras generaciones.
Aunque se despide como jugador, Marcelo afirmó que “aún me queda mucho que dar al fútbol”, sugiriendo que su pasión por el deporte continúa. Su legado, tanto en el Real Madrid como en la selección brasileña, perdurará en la memoria de los aficionados al fútbol.
