Entrevista de Uriel Guevara con el fotoperiodista Milton Flores
Foto: álbum de Milton Flores
Milton “El Loco” Flores, como se le conoce por su astucia y dinamismo en el ambiente periodístico de nuestro país, es un fotoperiodista originario de el cantón El Tablón, Morazán, y cuenta con una trayectoria de 25 años en dos de los periódicos escritos de mayor circulación en El Salvador El Diario De Hoy (EDH), y La Prensa Gráfica (LPG).
A lo largo de su vida profesional ha cubierto distintos eventos relevantes y diversos como la visita del Papa Juan Pablo II a El Salvador, el mundial de fútbol sub 20 de Turquía 2013, el mundial de fútbol Brasil 2014, entre otros.
Actualmente cumple como coordinador de fotografía para LPG; y en el marco de la celebración de la semana del comunicador, actividad impulsada encargados y estudiantes de la licenciatura en comunicaciones. Las autoridades de la Universidad de Oriente (UNIVO), lo invitaron para ser el ponente durante el día jueves 27 de julio, enfocado en su trayectoria fotográfica.
UNIVO News aprovechó la visita para conversar con el Lic. Flores, y esto fue lo que nos compartió.
¿Qué motiva especialmente a Milton Flores a participar en ponencias orientadas a jóvenes?
Bueno, yo creo que es importante enseñar o por lo menos dirigirte a las nuevas generaciones y contar tu experiencia, porque los estudiantes aprenden de uno al escuchar debido al conocimiento que se ha adquirido a lo largo de los años,
¿Qué tipo de fotoperiodista se considera?
Soy un fotoperiodista de choque
¿Por qué?
Siempre he ido al frente, mi costumbre es ir adelante y no atrás. Eso es un riesgo porque somos los que aguantamos las pedradas y las bendiciones, las bendiciones son putiadas que recibimos jajaja… pero es un riesgo que vale la pena, aunque ir de choque no siempre significa tener la mejor foto, hay que esperar, tener paciencia y atreverse; solo así se pueden conseguir fotos que otros desearían tener, jajajaja.
¿Es necesario romper con el protocolo para conseguir buenas fotos?
Nombre, es que para mí no existe el protocolo… lo he roto siempre, pero por conseguir una buena foto, no porque tenga mala intención de hacerlo.
Cuando son eventos tiene que ver mucho el protocolo, y ellos no saben de imagen, ubican a los fotógrafos donde solo espaldas van a captar; ese es el problema en este país, que hacemos todo al revés ¡los gringos noooo! ellos te dicen: aquí te vas a estar, y no te mueves de ahí; pero ponen el sujeto enfrente para las fotografías y te quedan chivas.
Nos habla de los estadounidenses ¿hay alguna experiencia que vivió en ese país?
Cuando Oscar “el famoso” Hernández se convirtió en campeón del mundo, yo cubrí esa pelea en Las Vegas… y te voy a decir algo, aquí todo mundo conoce a LPG (La Prensa Gráfica), pero en Estados Unidos sos un simple fotógrafo y sos un fotógrafo porque llevas el equipo, pero de ahí nada más…
En esa ocasión yo logré obtener una ubicación “right side”, en esa estas a un costado del cuadrilátero, ahí agachadito, es una buena ubicación, pero ¿Qué sucede?, “el famoso” Hernández gana y cuando se va a celebrar lo tengo al otro costado, en la esquina opuesta de donde yo estoy… entonces, no me queda de otra; me metí al cuadrilátero y tome las fotos, cuando le entregan el cinturón y cuando le levantan la mano. Pero después un seguridad se acercó y en ingles me dijo muy gentilmente que me saliera, y como me dejaron en el pasillo yo me volví a meter por otra puerta (risas). Como ya me conocían, cuando me volvieron a ver dentro, me sacaron; por suerte yo ya tenía las fotos en mi laptop, y logre dársela a un compañero que también estaba cubriendo la pelea, él envió mis fotos, eso me salvo la noche, jajajaja.
Este tipo de experiencias marcan la vida de un fotógrafo, pero ¿hay otros casos peculiares como este?
Fíjate que una vez le rompí el protocolo al presidente Calderón Sol. Me Salí del corral (así le llamamos nosotros a la zona que nos asignan para tomar fotos). Entonces llamaron de casa presidencial para el medio donde yo trabajaba y me llamaron la atención; pero nada, uno se acostumbra eso y se termina volviendo normal.
En este tipo de casos ¿cómo sobrelleva la obligación de no romper el protocolo y al mismo tiempo obtener buenas fotos?
Tenemos que ser como el camaleón y adaptarnos, en el sentido de adaptarse a las diferentes situaciones, el camaleón cambia de color para sobrevivir y uno a veces tiene que cambiar de actitudes para mantenerse en el trabajo, jajaja… pero ojo, no siempre, hay momentos en los que no te queda otra alternativa y tenes que jugártela la vida para conseguir tus fotos.
El ser profesional nunca lo aleja de ser persona ¿de qué manera se asimila eso?
¡Ehhhh puya!, que pregunta más difícil esa… aquí hay un riesgo en esta profesión, pero en un país como este donde todos los días nos levantamos con muertos, escenas dramáticas… el reto es no perder la sensibilidad, porque no es fácil, es fácil perder la conciencia social. Si tu ves algunos que dicen llamarse periodistas en Facebook e Instagram, los ves comiendo encima de los muertos, se están riendo; pero si uno tiene la sensibilidad dice: puya, este momento no es adecuado… tiene que tener mucho cuidado y ese es uno de los retos en esta profesión, ser sensible con lo que le pasa a otro; no te digo que te vas a poner a llorar, pero si ser prudente en la manera de comportarse.
Ya hablamos de esas dificultades o retos que se tienen como foto periodista, pero ahora cuéntenos ¿Qué es lo más valioso que ha logrado, lo que lo anima hace feliz en su profesión?
Conocer el mundo, creo… ha sido una de las experiencias más gratificantes, porque esta profesión no es para hacer dinero, el dinero no es para todos. ¡imagínate! Yo nunca pensé que conocería Francia, Brasil o Turquía, y gracias a mi trabajo lo he logrado. También cuando inicié en esto soñaba con ser el número uno, y no lo he logrado; pero si quiero que cuando miren a este maje, digan: este es una m…., una m…. como persona, pero muy bueno en lo que hace o en lo que hacía. Independientemente en lo que hagas o de donde trabajes, porque yo aún asisto a mañanas alegres de esas que celebran con los niños en los colegios, y otros talvez más malos que mi se sienten ofendidos cuando les piden cubrir o evento de este tipo; yo lo hago porque hay que ser humilde y además me gusta interactuar con la gente, salir de las 4 paredes y hacer fotos, me divierte…
Durante sus 25 años de ejercer la profesión ha tenido que cubrir eventos de diferente índole, pero ¿con que área se siente más identificado?
En el deporte, me gusta mucho; pero es un área donde se necesita tener mucha precisión, tenes que adelantarte a la jugada, saberte ubicar donde estas, saber dónde van a pasar las buenas jugadas o saber dónde van a caer los goles. Entonces a mí me gusta el deporte porque fue uno de los retos que yo me puse, cuando ya trabajaba en el periódico, yo me iba con los compañeros que hacían fotos de deporte e insistía, así fui aprendiendo, hasta que un día por fin publicaron una foto mía. Pero fue mi insistencia la que me impuso, después de eso vinieron mundiales y otras cosas que he logrado.
Tomando en cuenta el avance de la era digital en los últimos años, esto ¿De qué manera ha influido en el fotoperiodismo?
La tecnología nos facilitó la vida, hoy ya no tenemos que correr… antes teníamos que andar cargando una bolsa con rollos, teníamos 36 disparos por rollo. Entonces después te tomar las fotos, teníamos que salir corriendo al laboratorio y revelarlas y después a digitalizarlas con un scanner para subirlas a la computadora y poderlas enviar. Hoy con tu cámara, una memoria y tu computadora lo podés hacer todo mucho más fácil.
ahora bien, el andar una cámara no te hace un fotógrafo… claro hay aficionados que practicando llegan lejos, acordate que la practica hace al maestro.
Si tuviera que volver a elegir ¿elegiría la misma profesión?
Sí, pero me gustaría haber iniciado más joven, porque inicie a los 20 años y si hubiera hecho a los 16, en cuatro o 5 años bien hubiera tenido el conocimiento que tengo ahora…
¿Qué consejo que le da a los jóvenes que se inician en el ámbito de la fotografía?
En todas las carreras depende de la actitud del estudiante, si tú quieres ser abogado y tienes una mala actitud vas a ser un mal profesional. Entonces el consejo seria la actitud, que sepan que deben de tener el lomo de un burro para andar cargados, porque el equipo pesa jajajajaja y las responsabilidades aún más, porque hay que ser responsable.
El reto es no perder la sensibilidad, porque no es fácil, es fácil perder la conciencia social. Si tu ves algunos que dicen llamarse periodistas en Facebook e Instagram, los ves comiendo encima de los muertos, se están riendo; pero si uno tiene la sensibilidad dice: puya, este momento no es adecuado… tiene que tener mucho cuidado y ese es uno de los retos en esta profesión, ser sensible con lo que le pasa a otro; no te digo que te vas a poner a llorar, pero si ser prudente en la manera de comportarse».
