
El Platense se encuentra en una encrucijada crítica, ya que el Comité de Licenciamiento de Clubes de la FESFUT le ha impuesto un plazo de 48 horas hábiles para cumplir con sus obligaciones salariales, de lo contrario, podría enfrentar un descenso administrativo.
Por Luis Hernández
La situación del Club Platense se ha tornado alarmante tras recibir un ultimátum del Comité de Licenciamiento de Clubes de la FESFUT. Según fuentes federativas, el club debe presentar las copias de los recibos de pago correspondientes a una deuda salarial que supera los dos meses y medio. Este plazo expira el próximo martes 15 de octubre, lo que ha generado una creciente preocupación entre los aficionados y directivos del equipo.
La deuda acumulada ha puesto al Platense en una posición vulnerable, y los dirigentes se encuentran en una carrera contrarreloj para evitar sanciones que podrían derivar en el descenso administrativo. La falta de cumplimiento con las obligaciones salariales no solo afecta a los jugadores, sino que también podría tener repercusiones graves en la estabilidad financiera y la reputación del club.
Los hinchas, que históricamente han estado al lado del equipo en momentos difíciles, ahora esperan ansiosos noticias sobre la resolución de este crisis. La presión aumenta y el futuro del Platense pende de un hilo, con la fecha límite acercándose rápidamente. En los próximos días, se definirá si el club puede sortear este obstáculo o si, por el contrario, el descenso administrativo se convierte en una dura realidad.