Foto: Beatriz Iraheta
Nory del Carmen Chavarría Hernández siempre anda deprisa, el pelo lo lleva de largo, más abajo de la cintura, liso, azabache; su menuda figura no tiene nada que ver con su liderazgo, donde ella está se trabaja, se propone, planifica y ejecuta.
Ella conoce sobre los temas políticos del país, los analiza, los descubre y hasta escribe sobre ellos, pero también tararea canciones de su generación, le gustan los ritmos de los músicos de Morazán, ríe como los jóvenes de su edad.
Nory, como todos le llaman, tiene 19 años, es estudiante destacada de Comunicaciones de la Universidad de Oriente (UNIVO) , voluntaria en su comunidad Los Quebrachos, municipio de Jocoaitique, Morazán; suelen buscarla de presentadora de eventos y hasta le han ofrecido representar a los jóvenes de su departamento en el consejo local del Instituto Nacional de la Juventud. Ella, ganó una beca del Instituto de Estudios de los Estados Unidos (SUSI) por sus siglas en inglés. y está muy comprometida a dar lo mejor de sí misma.
Concedió una entrevista, esto fue lo que nos dijo:
¿Se imaginaba obtener una beca para Estados Unidos?
Nunca lo imaginé, para mí es un orgullo, un honor, una oportunidad y un gran reto por cumplir, una responsabilidad.
Una beca no se consigue al azar, sus notas, su rendimiento académico y su compromiso social han ayudado…
Si, el CUM (Coeficiente de Unidades de Mérito) es importante, eso es lo primero que piden para considerar a los candidatos, el historial académico que he tenido en la UNIVO, el compromiso comunitario.
¿A su juicio que ha sido lo más importante para poder ser seleccionada como becaria?
Nos tocó exponer en 15 minutos lo que hacemos, nuestro interés por la juventud, analizamos los problemas de los jóvenes actualmente, plantemos nuestras ideas como ayudar a resolverlos desde sus realidades, fue una experiencia intensa, interesante y al terminar ese ejercicio algo me decía que si, que iba a quedar seleccionada.
¿Qué hace además de estudiar, a qué hora inicia su jornada?
Cuando viajo desde Morazán debo levantarme a las 4:00 de la mañana, tomo dos buses para ir a clases, regreso, llego tarde, descanso un rato, me gusta irme a la hamaca porque ahí mi abuela “Mamá China” me lleva café y mi abuelo me cuenta historias, ellos fueron educadores y siempre han vivido pendientes de mí. Por las tardes los lunes voy a la reunión de la Asociación de Jóvenes; en la noche estudio y hago tareas, ahora también estoy en el periódico de la UNIVO, UNIVONews, como Co-editora.
¿Considera que los jóvenes pueden generar cambios sustanciales?
El mayor problema de la juventud es que no se interesa y debemos hacer las cosas por convicción, debemos involucrarnos en la realidad local, hacer pequeños cambios que luego serán grandes.
¿Y sus metas a mediano y largo plazo?
He crecido en un ambiente donde siempre he experimentado la organización, por eso, uno de mis mayores propósitos es ayudar en ese sentido, concienciar a los jóvenes, meterse en el esfuerzo de generar cambios, de ser agentes de ese cambio. Lo que tengo claro es que no quiero defraudarme, ni a mi familia, ni a todos los que creen en mí, quiero comprometerme a realizar algo por la sociedad, por los jóvenes, por el desarrollo.
Debemos hacer las cosas por convicción, debemos involucrarnos en la realidad local, hacer pequeños cambios que luego serán grandes»
Tiro al plato En una palabra, defina: Nory: Luchadora Dios: todo Libros: sabiduría Jóvenes: fuerza Desarrollo social: esencial
