Cultura

“¡Le llevo las rosas, a dos coras las rosas! para esa personita que más quiere…

Pregonando en las calles de San Miguel, con rosas en mano,  don Ernesto busca por las calles más transitadas a uno que otro enamorado

Redacción y fotografías: Miguel Rodríguez

Febrero, un mes en el cual el color rojo destaca entre muchos por representar la pasión y el amor, mes en el que detalles con corazones y flores sobresalen para llamar la atención de todos aquellos que sienten “mariposas en el estómago”.

El centro de la ciudad de San Miguel no se escapa de este ambiente febril del mes del amor.

Manuel Ernesto Maraver, originario de San Salvador es uno de los muchos comerciantes que cada año, junto con seis vendedores más viaja hasta la perla de oriente para poder ofrecer rosas, peluches, tazas y chocolates a cualquier persona que quiera regalar un bonito detalle en estas fechas.

Él, empieza a transitar las calles de la ciudad desde las seis de la mañana el sábado, pregonado con una voz cálida: “¡le llevo las rosas, a dos coras las rosas! para esa personita que más quiere, lleve las rosas a dos coras” decía mientras recorría con sus coloridas rosas en mano, parte desde la 3° Av. Norte, la 2° calle poniente y los alrededores de lo que fue el parque Barrios, en búsqueda de algunos enamorados.

“¡Puchica como que se ha perdido la tradición del día de los enamorados! ya nadie quiere regalar nada. Yo aquí ando, vendiendo rosas, lo más barato, para que le den algo a la chica pero ¡puchica! son duralita (tacaños)  los cipotes ahora. No es como en nuestros tiempos ¡esto no era nada!” manifestó, hasta el momento sus ventas no habían ido muy bien.

“Esta calmado, me he tirado a “ruletear” este día, pero, espero que las ventas mejoren en el trayecto de la semana. La inversión que hacemos con un grupo de compañeros es de dos mil dólares, entre productos como peluches, tasas, flores y chocolates. Entre los seis que andamos le metemos con ganas para poder sacar ese dinero y la ganancia” agregó Ernesto, quien a las diez de la mañana solo había vendido dos rosas (un dólar).

Él es uno de los muchos comerciantes que aprovechan la temporada para poder generar ganancias extras que ayuden en su hogar. “En este mes siempre es bueno demostrar con un detalle que aprecias mucho a esa persona especial ¡aquí andamos de padrinos!” finalizó el vendedor capitalino.

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Redacción UNIVO NEWS

Equipo de periodistas, estudiantes, editores y productores de la Carrera de Comunicaciones de la Universidad de Oriente UNIVO.

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